No es lo mismo

Aunque pueden intercambiarse en diferentes contextos, estos términos tienen etimologías y aplicaciones diferentes.

Confundir es mezclar cosas diferentes de forma que no puedan distinguirse, viene del latín confundere y significa "quitar límites hasta que no se vea donde termina uno y empieza el otro". Sus componentes léxicos son: el prefijo con- (junto, todo) y fundere (derretir, mezclar).

También se aplica cuando alguien o algo se mezcla con otras cosas que ayudan a enmascararlos:

"El delincuente corrió hasta confundirse entre la multitud"

"El cambio de la fachada del edificio me confundió y perdí la noción de la ruta"

Equivocar tuvo su origen a unir el prefijo equi, que significa igual, con vocus (voces, palabras o frases), llegando a convertirse en "tomar una cosa por otra"

"Me equivoqué de cartera y llevé la que no tenía el pasaporte dentro"

"La policía se equivocó y arrestó a Daniel por Dainel".

Pero siempre habrá una similitud, una razón para que se produzca el error.

Una forma de precisar la diferencia es mediante sus adjetivos, ya que no es lo mismo estar confundido que estar equivocado.

Digamos que alguien afirma que la tierra es plana con plenitud de convencimiento, esa persona no está confundida, aunque esté equivocada.

Por regla general, las personas nos damos cuenta por nosotros mismos de cuando nos equivocamos:

"Disculpa, no quise decir asequible, sino accesible".

Si estás confundido, entonces sostienes que son sinónimos porque has mezclado sus significados, no los tienes definidos.