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Escribiendo diálogos eficaces en tu novela


La función del diálogo es múltiple y su presencia en una narración no responde al estilo del escritor, sino a una técnica específica que se puede ir perfeccionando mediante la lectura de obras de escritores consagrados, pero también leyendo a escritores noveles.

Esto último se debe a que al leer autores de menos experiencia, podemos encontrar los puntos débiles y aprender cómo no hacer las cosas.

El diálogo es útil para lograr los siguientes puntos:

1.- Hacer avanzar la historia.

2.- Evolución de los personajes.

3.- Añadir ritmo, fluidez y realismo.

4.- Caracterizar a los personajes.

5.- Aportar información crucial.

6.- Romper la monotonía.


Veamos lo anterior en un ejemplo:

—Curiosamente, me he quedado en en este pueblo por mucho más tiempo del que pretendía —dijo Lucy—. Vine por una semana y ya llevo quince años. Vine a cuidar la casa de un amigo que iba a hacer un viaje y, sin querer, me vi envuelta en un proceso judicial. No como acusada, sino como testigo. Pero las autoridades me exigieron que debía permanecer mientras durara la investigación y, en ese lapso, mi amigo me hizo saber que no regresaría nunca más y me fui adaptando a este tranquilo pueblo donde encontré el amor.


Veamos ese mismo fragmento convertido en diálogo:

—Curiosamente, me he quedado en este pueblo por mucho más tiempo del que pretendía —dijo Lucy con tono complacido—. Vine por una semana y ya llevo quince años. —Pero, ¿cómo viniste a parar aquí? —En principio, para cuidar la casa de un amigo y, luego, me retuvo una investigación criminal. —¡¿ Una investigación criminal?! —Sí. —¿Es que acaso cometiste…? —¿Un crimen? No. Pero sí fui testigo involuntaria de un asesinato y aunque pude guardarme el secreto, mi consciencia me obligó a llamar a la policía. —¿Y no te dio miedo que el asesino tomara represalias? —Arturo empezó a sentir verdadera curiosidad por conocer más detalles de tan singular proceso. —¡Por supuesto que estaba aterrada! —admitió Lucy sospechando que tendría que narrar el episodio. Luego añadió—: Pero gracias a ese tragedia fue que conocí el amor.


La historia avanza, ya que a través de este breve diálogo se dan a conocer los motivos que llevaron a la protagonista a llegar y quedarse en un pueblo extraño, aportará el tiempo con exactitud, además de caracterizarla como una persona sensible y valiente (ayudar a un amigo que necesitó de ella y denunciar un homicidio a pesar de los riesgos), al tiempo que el segundo personaje transmite al lector buena dosis de curiosidad por el suceso que involucró a Lucy en una investigación y de qué forma esto pudo influir en que se enamorara. ¿Acaso se enamoró del asesino?... ¿O del investigador?


La intervención alternada entre un personaje y su interlocutor imprime mucho ritmo al relato, al tiempo que ubica, describe, acota y precisa, pero, a su vez, también permite introducir otro personaje y sus características, facilitando que el narrador exponga algunas circunstancias que resultarían forzadas si se narraran de manera lineal.


Siempre que exista un detalle que se considere puntual para la historia, lo más inteligente es convertirlo en diálogo. Con esta ténica cumplimos con todo lo mencionado con anterioridad y evitamos de diálogos vacíos e irrelevantes que podrían hacer que los personajes sean aburridos y poco creativos. Esto es totalmente contraproducente si se tiene en cuenta que la premisa de la novela es el el desarrollo y evolución de los personajes más que el del relato en sí.

















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